7ª SESIÓN DEL FORO PERMANENTE DE NACIONES UNIDAS PARA ASUNTOS INDÍGENAS

EL LUGAR Y EL MOMENTO DONDE PLANTEAR LOS GRANDES TEMAS

Nota de Ana María Barbosa publicada en Semanario “Acción Informativa” de Tacuarembó.

Entre los días 21 de abril y 2 de mayo, se realizó el Foro Permanente de Naciones Unidas para asuntos indígenas, en la sede central de la ONU en Nueva York.

Fue inaugurada en forma brillante por el Presidente de Bolivia Evo Morales Ayma, en lo que denominó los “diez mandamientos” para salvar al mundo, la vida y la humanidad, expuso ante el plenario del Foro todos los temas que afligen hoy a las comunidades indígenas del mundo, exigiendo a los Estados la urgente toma de decisiones y ejecución de políticas públicas que sean capaces de atender las emergencias de los indígenas y además proponer desde su propia cosmovisión una propuesta alternativa a grandes problemas como el del cambio climático, el medio ambiente y la seguridad alimentaria.

Hizo, como es su costumbre, una referencia especial por el respeto a la tierra y la renuncia a la guerra, reivindicando el agua y la tierra como derechos humanos. Habló de la necesidad de desarrollar las energías limpias y el NO a los biocombustibles, promover la diversidad de la cultura y el vivir bien a través de un socialismo comunitario en armonía con la Madre Tierra.
Afirmó Evo que únicamente dos caminos hay para salvar a la humanidad, la vida y la tierra, o se opta por la recuperación de una forma de convivencia en armonía con la madre tierra y la vida, o seguir el camino del capitalismo y la muerte.

Durante esas dos semanas se trataron en diversas reuniones, con diversas convocatorias y muy heterogéneo público, temas como el cambio climático, tierra y territorio, espiritualidad indígena, revitalización y conservación de lenguas originarias, desarrollo con identidad, sistemas de información e indicadores de desarrollo, derechos humanos, derechos colectivos, mujer, niñez y familia.

PRIMERA PARTICIPACIÓN DEL FONDO INDÍGENA COMO ORGANISMO INTERNACIONAL EN UN FORO DE NACIONES UNIDAS

En lo que respecta al Fondo Indígena, por primera vez participa en forma orgánica como organismo internacional en un foro de Naciones Unidas.

Nos tocó organizar la jornada sobre revitalización lingüística, un tema que no parece tan importante, pero que sí lo es, sobre todo si pensamos que en la lengua se transmite la cultura, las costumbres, una posición en el mundo desde una óptica diferente. Hubo brillantes exposiciones de expertos lingüistas y de sabios indígenas y muchísimos aportes desde el auditorio.
También participamos en los paneles sobre indicadores de desarrollo de los pueblos indígenas y desarrollo con identidad.

Lo interesante de todos estos debates, exposiciones y mesas redondas, es que salen una serie de recomendaciones a los Estados. Todos estos planteos se ven potenciados este año, por la coyuntura especial que les da la aprobación en setiembre de 2007 de la Declaración sobre Derechos de los Pueblos Indígenas, aprobada en la Asamblea General de Naciones Unidas, que compromete fuertemente a los Gobiernos del Mundo a legislar y hacer políticas públicas en el sentido del desarrollo de los indígenas del mundo.

Respecto a nuestra experiencia personal, todo fue muy enriquecedor: llegar a Nueva York, la que se dice “Capital del Mundo”, la gran ciudad deslumbrante con su población cosmopolita, con sus luces, sus grandes teatros y sus lugares históricos, la Estatua de la Libertad imponente allí en la bahía, el Central Park, el Bronx, Broadway, la Quinta Avenida, su universo de rascacielos interminables, su Zona Cero, el estadio de Los Yankees, sus veintitantos puentes, sus limusinas lujosas, sus empleados latinos, sus negros y negras esculturales, en fin, el primer mundo…con sus gordos, sus comidas chatarras, su smog, su contaminación visual y auditiva…, gente que vive, lucha y sueña como en todas partes del mundo.

Una semanita en ese mundo disfrutable, no hay que negarlo, pero que aumenta la nostalgia y el amor a nuestra querida tierra verde, llena de horizontes y cielos azules, de silencios cómplices y cantar de pájaros en las mañanas, con nuestras necesidades y luchas diarias…, otro mundo indudablemente… Hasta la próxima.